Profecías y Señales
En busca de la Verdad
Los libros proféticos de Daniel y Apocalipsis
Los libros de Daniel y Apocalipsis son dos libros proféticos escritos para que la raza humana pueda saber y entender lo que Dios ha determinado hacer sobre este mundo al final de sus días. Son libros que revelan el por qué de cada acontecimiento y de los juicios llevados a cabo por Dios.
Contrariamente a lo que se cree por la mayoría de la gente, estos libros no son difíciles de entender si se los estudia con diligencia.
La misma palabra de Dios escrita en las Sagradas Escrituras así lo muestran:
Amós 3:7 dice: Porque no hará nada Jehová el Señor, sin que revele su secreto a sus siervos los profetas.
El mismo libro de Apocalipsis, escrito por Juan alrededor del año 90 d.C., tuvo su origen en Dios, porque Juan dice que un ángel le declaró las cosas que Jesús le había revelado según le había dado el Padre. que habían de suceder en el tiempo del fin.
Apocalipsis 1:1-3 dice: La revelación de Jesucristo, que Dios le dio, para manifestar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; y la declaró enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan, que ha dado testimonio de la palabra de Dios, y del testimonio de Jesucristo, y de todas las cosas que ha visto. Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella escritas; porque el tiempo está cerca.
Entonces, si a Juan se le revelaron las cosas que han de suceder lógicamente es para que los entendidos las comprendan y estén prparados para esos días. De otra manera no tendría sentido revelar algo que no se pudiera entender.
El mismo libro de Apocalipsis 22:8-10 dice: Yo Juan soy el que oyó y vio estas cosas. Y después que las hube oído y visto, me postré para adorar a los pies del ángel que me mostraba estas cosas. Pero él me dijo: Mira, no lo hagas; porque yo soy consiervo tuyo, de tus hermanos los profetas, y de los que guardan las palabras de este libro. Adora a Dios. Y me dijo: No selles las palabras de la profecía de este libro, porque el tiempo está cerca.
En cambio en el libro de Daniel, que fue escrito alrededor del año 600 a.C. y allí se le manda sellar el libro, puesto que habían sido escritas para el tiempo del fin. En la época de Daniel, la gente no podía entenderlo, es por eso que se le dice que cierrw las palabras del libro
Daniel 12:4 dice:Pero tú, Daniel, cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin. Muchos correrán de aquí para allá, y la ciencia se aumentará.
A estos dos libros proféticos la misma Biblia nos ayuda a interpretarlos y la pruimera regla de interpretación nos dice que debemos leer el pasaje e interpretarlo en forma literal, tal cual está escrito, a menos que el contexto nos indique que es algo simbólico.
Si el contexto es simbólico entonces la misma biblia nos interpreta esos símbolos.
Por ejemplo:
Apocalipsis 17:1 Vino entonces uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera, la que está sentada sobre muchas aguas;
Apocalipsis 17:5 Me dijo también: Las aguas que has visto donde la ramera se sienta, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.
" Se necesita un estudio mucho más detenido de la Palabra de Dios; especialmente Daniel y el Apocalipsis deben recibir atención como nunca antes... La luz que Daniel recibió de Dios fue dada especialmente para estos postreros días. El último libro del Nuevo Testamento (Apocalipsis) está lleno de verdades que necesitamos entender. Pronto se cumplirán las predicciones incumplidas del libro de Apocalipsis. Ahora el pueblo de Dios debe estudiar con diligencia esta profecía y entenderla claramente. No encubre la verdad; nos advierte con claridad, diciéndonos lo que sucederáen el futuro. Los solemnes mensajes que en el Apocalipsis se dieron en su orden deben ocupar el primer lugar en el pensamiento de los hijos de Dios. El tema debiera mantenerse ante la gente. Hay muchas personas que no comprenden las profecías que se refieren a estosdías, y por lo tanto deben ser ilustradas.
Citas extraídas del libro "Eventos de los últimos días"
De Ellen G. White
